ASESORÍA FISCAL
El sistema fiscal mexicano es sumamente complicado, entenderlo no es fácil y, por tanto, tampoco lo es tener certidumbre en su aplicación. Esto obedece a una estructura sobrerregulada en algunos aspectos y a una importante falta de claridad conceptual.
A esto debemos sumar la complejidad que la materia fiscal tiene en virtud de su propia naturaleza, la cual hace indispensable entrelazar diferentes ramas del derecho, junto con la técnica contable.
Con frecuencia, esto representa toda una exigencia interpretativa y de conjugación de normas, como en el caso de la enorme influencia que el derecho fiscal tiene sobre figuras como la fusión, la escisión y la liquidación de sociedades mercantiles, o bien, sobre la distribución de dividendos, el reembolso de aportaciones y la propia integración de la contabilidad.
Lo mismo sucede, por ejemplo, con la mescolanza conceptual enclavada en las disposiciones que regulan el “costo de lo vendido” -costo de ventas-, al resultar con esto, que una de las deducciones de mayor relevancia en el impuesto sobre la renta debe configurarse no sólo a la luz de disposiciones de derecho público, sino con apoyo en la normatividad utilizada para la elaboración de estados financieros: las normas de información financiera emitidas por el Consejo Mexicano de Normas de Información Financiera, A.C. (CINIF).
En este contexto, el legislador, el Poder Judicial de la Federación, el Tribunal Federal de Justicia Administrativa y el propio Servicio de Administración Tributaria (SAT) han creado un amplio y complicado entramado de disposiciones que deben tenerse en cuenta de manera conjunta -para efectos de análisis y aplicación-, y que han llegado al extremo de definir los términos en que se pactan las operaciones comerciales, societarias y de negocios en general.
No cabe duda, pues, que en el ámbito empresarial, es trascendental tener certeza en torno a los efectos fiscales de las decisiones tomadas.
Lo mismo sucede con el patrimonio personal: su protección permanente, con un enfoque tributario, es indispensable para mantenerlo sin menoscabo y libre de contingencias.
De ahí la relevancia de contar con asesoría prestada por profesionales capacitados, con amplia y probada experiencia en la solución de problemáticas y situaciones complejas.
Nuestros servicios comprenden lo siguiente:
1.
Planeación fiscal estratégica.
2.
Desahogo de consultas de carácter fiscal.
3.
Asesoría e intervención en la atención de auditorías fiscales.
4.
Diagnóstico y asesoría sobre situaciones y contingencias fiscales concretas.
5.
Diagnóstico y asesoría sobre los efectos fiscales producidos en la fusión, escisión y liquidación de sociedades.
6.
Diagnóstico y asesoría sobre obligaciones “antilavado”.
7.
Diagnóstico y asesoría sobre el régimen de subcontratación laboral y sus efectos fiscales.
8.
Asesoría e intervención en trámites de devolución de cantidades a favor.
9.
Flujo de efectivo a socios o accionistas.
10.
Asesoría en la elaboración de declaraciones de pago.
11.
Asesoría en la elaboración de avisos al Registro Federal de Contribuyentes y cumplimiento de obligaciones en general.
12.
Asesoría en la elaboración de cálculos fiscales.